«Crónicas de un viajero» retoma su pluma y esta vez nos transporta a la cuna de los derechos del hombre y del ciudadano, «La France»:
Parto desde Barcelona con destino al país galo. Tras unas pocas horas de viaje arribo a Languedoc-Rosellon, región administrativa del sur de Francia. Sus ríos y verdes y onduladas colinas le otorgan un matiz pintoresco, a sus ciudades históricas repletas de numerosos ejemplos de soberbia arquitectura romana. En este área predomina la ganadería y la viticultura, mientras la actividad industrial, tiene poco peso específico. Una significativa cantidad de uvas cultivadas en Francia, proceden de esta región, que produce unos vinos fuertes y oscuros como el fitou y el corbieres. No muy lejos de la frontera con España, a orillas del Tet, se encuentra Perpignac, la ex sede de la Generalitat de Cataluña.

Entre sus emblemáticos monumentos, que reflejan la vinculación, que tuvo a lo largo de la historia con la corona de Aragón, descuellan la Catedral gótica de San Juan y el Castillo de los reyes de Mallorca. En el departamento De Aude y a orillas del río de nombre homónimo se situa en lo alto de una colina, Carcasonne. La ciudad dividida en la VilleBasse y la amurallada villa (Cité), alberga algunos sectores de la época de los visigodos. Los antiguos terraplenes defensivos y las torres confrontan con joyas arquitectónicas tales como la Catedral de San Miguel, la Iglesia de San Vicente y San Nazario (gótica-románica). En Montpellier, centro administrativo y cultural de Longuedoc Rosellón, los paseos con vista al Mediterráneo se pueden alternar con visitas al museo Fabre (colecciones de pinturas francesas) y al Jardín Botánico(el más antiguo de Francia). La ciudad es sede de un Festival Internacional Del Vino y de una relevante Universidad. En una llanura de Cevennes, se yergue uno de los mejores tesoros arqueológicos de época romana en Francia. Se trata de Nimes, bastión protestante durante la Reforma donde se puede apreciar el Puente Gard (acueducto romano), La Maison Carrée (templo griego), el templo de Diana (museo de esculturas) y la torre Magna. Mención especial merece una excelsa herencia del urbanismo clásico: El Paseo o Parque de Peyrou, dominado por un surtidor hexagonal alimentado por un acueducto. Los Museos (arqueológicos, de bellas artes, de historia local), la Arena de Nimes (ex circo romano) y la Catedral de S. Castor, terminan de cristalizar la fama de esta ciudad que otrora fuera floreciente colonia comercial.

“Paris bien vale una Misa” (Enrique IV de Navarra)
Luego de recorrer estas tierras de cátaros aniquilados por los Estados Pontificios, sigo viaje, vía Lyon, hacia Paris (Celtas pescadores, los parisii, le dan nombre a la Ciudad Luz) a donde arribo a medianoche. Plano en mano recorro la cuna de Proust y Zola, en busca de hospedaje. Finalmente me instalo en un Youth Hostel, a metros de la Place de la Republique. París, esta situada, en el corazón agrícola de una de las zonas más ricas de Europa, a orillas del Sena (puede recorrerse en barcaza), en una cuenca a baja altitud y rodeada por colinas. En el Sena encontramos 2 Islas: La Cité y la de Saint Luis. Aproximadamente el 20% de la población vive, en esta ciudad, la cual es la forma esencial de la economía, de la vida cultural y política de todo el país galo. Es también el principal centro industrial de Francia (maquinaria, química, perfumes, joyas, indumentaria de la “haute couture”, industria publicitaria). Además centraliza la red nacional de autopistas y líneas férreas y cuenta con aeropuertos internacionales. Con respecto a la Banca y las Finanzas, es uno de los centros comerciales más importantes del Mundo. Estudiantes franceses y de todas partes del Mundo, asisten a los claustros de rancia estirpe de la mundialmente famosa Sorbonne. París cuenta con numerosas emisoras radiofónicas y televisivas. Asimismo con periódicos prestigiosos, tanto a nivel nacional como internacional, como Le Monde y Le Figaro.
· Paisaje Urbano: Entre los distritos que han mantenido una identidad propia cabe destacar: el “quartier latin”que se encuentra en la margen izquierda del Sena, notable por las actividades educativas y culturales que lleva a cabo; por otro lado, los distritos residenciales de alto poder adquisitivo y las zonas comerciales se encuentran en la margen derecha, cerca de los Campos Elíseos, como es el caso de Passy y Auteuil; y, por último, los barrios de clase obrera más populares, situados al noreste de la ciudad, como Belleville y La Chapelle. Auguste Perret (teatro de los Campos Elíseos), Gustave Eiffel, Deglane (Grand Palais) y Girault (Petit Palais) ilustran la evolución Guimard del estilo hacia las líneas curvas y ondulantes características del Art Nouveau; formas que se encuentran en los muebles de Louis Majorelle, en los vidrios de Émile Gallé, los cristales de Auguste y Antonin Daum y en las bocas del métro. Champs Elysées, una de las avenidas más famosas del mundo es una gran “vitrina” comercial, asimismo de lugares como el Lido y el Café Fourquet´s.
· La Défense: La misma se construyó en uno de los principales distritos comerciales de París alberga un área comercial creado en las décadas de 1960 y 1970. Para conmemorar el bicentenario de la Revolución Francesa se construyó el Gran Arco que está situado en línea recta a través de la plaza del Arco de Triunfo hacia los Campos Elíseos. Vía al “Grande Arche de la défense” y próxima a la “Porte Millot”, una estación de Métro lleva el nombre de Argentina.
· Espacios abiertos o de recreo: En las zonas verdes podemos apreciar jardines, caminos, lagos, museos y pistas deportivas. Ejemplo fiel de las mismas son el Bois de Boulogne y el Bois de Vincennes. Algunos de los parques son Monceau, Chaumont, Buttes y Montsousis. De la época de Catalina de Médice son los Jardines del Palacio de Luxemburgo, salpicados con estatuas de santos y bellísimos paseos. El mencionado lugar es cita obligada para quienes desean tomar sol. Tanto el Jardín Botánico como las Tullerías y el Campo de Marte constituyen también atractivas zonas, de muy buen diseño.

Atractivos Culturales
· Un símbolo: La Torre Eiffel se construyó a fines del XIX, en honor de la fidelidad de París al resto del mundo y se ha convertido en la seña de identidad de la ciudad. La estructura metálica permanece como un hito de la construcción monumental en hierro forjado. El edificio, sin su moderna antena de telecomunicaciones, mide unos 300m de altura. La base consiste en cuatro enormes arcos que descansan sobre cuatro pilares situados en los vértices de un rectángulo. A medida que la torre se eleva, los pilares se giran hacia el interior, hasta unirse en un solo elemento articulado. Cuenta con escaleras y ascensores, y en su recorrido se alzan tres plataformas a distintos niveles, cada una con un mirador, y la primera, además, con un restaurante. Cerca del extremo de la torre se sitúan una estación meteorológica, una estación de radio, una antena de transmisión para la televisión y unas habitaciones en las que vivió el propio Eiffel.
· Un cenotafio emblemático: El Arco de triunfo de l’Étoile situado al final de los Campos Elíseos, en la encrucijada de un sin números avenidas, fue encargado por Napoleón y concluido después de su muerte.
El monumento se inspira en el arco de Constantino en Roma, pero es el doble de alto y de ancho. Los bajorrelieves y las inscripciones relatan las victorias napoleónicas y tratados franceses. Actualmente en él, reposan los restos del soldado desconocido.

A fines del Siglo XX se terminó de construir la pirámide de cristal, la cual constituye la entrada principal al Museo de El Louvre. Propiedad del Estado, es obra maestra de diseño arquitectónico y adorno escultórico.

(Continuación de la semana pasada)

Los Teatros
La Academia Francesa (sede de compañías de música y teatro), la Comedia Francesa de Opera Cómica , el Odeón y la Ópera de la Bastilla, descuellan entre los lugares donde se revive el mundo del teatro y de la música en casi todas sus variantes. En el Café de La Paix, centro de músicos, libretistas, directores de escenas, escritores y personalidades tales como Verdi, Zola, la Callas, Simone de Bouvoir, Buñuel, etc.
Ud. no solo podrá degustar, un vaso de vino, un “croque monsieur” y un “café au crème” sino que desde allí, desde el Blvd. des Capucines y la place de L´Opéra podrá vislumbrar la neobarroca fachada de la sucesora de la Académie Royale de Musique, fundada por Luis XIV. Es nada menos que la Opera Nacional de Paris-Gernier. La misma cuenta con una sala a la italiana, un techo con un soberbio fresco de Mc Chagall y una muestra escultórica que decora la fachada. Una gran escalera, un vestíbulo y los auditorios se ven salpicados de dorados y adornos de detalles muy de moda en la época de Napolleón III. El citado Palacio y sus cuevas subterráneas han sido escenario donde se sitúa la acción de la novela “El Fantasma de la Ópera” y el manierismo italiano junto con elementos franceses, engalanan, a este gran reducto del bel canto.

Museos
El Louvre es, no sólo una de las mayores atracciones culturales de Occidente sino la mayor pinacoteca del Mundo. En el lugar de una fortaleza, Francisco I ordenó un palacio que fue residencia de reyes, durante años. Museo público a fines del XVIII, durante toda su historia ha sido objeto de distintas remodelaciones y durante la 2ª Guerra Mundial, sus obras artísticas fueron trasladadas a almacenes secretos. A fines del XX se terminó de construir la pirámide de cristal, la cual constituye la entrada principal al Museo. Propiedad del Estado, es obra maestra de diseño arquitectónico y adorno escultórico. Rafael, Tiziano, Rubens, Rembrandt, F. de Zurbarán, van Dyck y Tintoretto, entre otros, inundan algunas de las numerosas galerías. Diversos Departamentos albergan antigüedades egipcias, etruscas, griegas, romanas y orientales (arte mesopotámico e islámico), estampas, grabados, asimismo las Joyas de la Corona. Sin embargo el común de sus visitantes centra su atención, en la Venus de Milo, en la Victoria de Samotracia y naturalmente en la enigmática “Monalisa”.
A orillas del Sena y sobre lo que fue la histórica estación de trenes Orsay, se erige el Museo de nombre homónimo. Las pinturas, esculturas y fotografías “decoran” las 3 galerías de principios del XX. El Neoclasicismo francés y la Escuela de Barbizon, irrumpen en el Museo. Pero el mayor deleite a mis ojos lo produce la soberbia producción de los impresionistas y post impresionistas. El “desorejado” y holandés pobre, ignora, que sus creaciones, no sólo son objeto de estupefactas miradas sino que “revolucionan” las subastas, en el mercado internacional. Los burdeles, bailarinas de los carteles, bocetos, litografías, retratos y óleos reviven el “Paris Nocturno”; Toulouse Lautrec, el Moulin Rouge y el arte japonés: presentes!!!. Luego del recorrido podrá comprar libros, revistas, y/o serigrafías de Cezanne, Monet, Gauguin, Degas…
Si Ud se llega hasta el distrito de Marais, podrá conocer el Centro Georges Pompidou. De los 70’, es una de las mayores expresiones del concepto edificio-máquina de Le Corbuisier, concretado en una estructura de acero y cristal. El conjunto alberga un centro de Diseño Industrial, una biblioteca, una cinemateca con auditorio y el Museo de Arte Moderno. En este último, se observan colecciones que resumen los movimientos artísticos contemporáneos. Recorra esta obra de arquitectura moderna deleitándose con Marc Chagall, Kline, Giacometti, Braque y Picasso.
El pensador, escultura monumental en bronce realizada por Auguste Rodin, actualmente, es expuesta en el museo del pintor de París (el vaciado en yeso se encuentra en el Museo de Orsay y el bronce en el Museo Rodin). Figuras trabajadas en bajorrelieve y en altorrelieve, parecen debatirse contra su destino en un movimiento ascendente que converge hacia El pensador. Las figuras, tratadas individualmente, dan lugar a la mayoría de las esculturas de Rodin, como El beso, o Adán y Eva. El Pensador suscitó numerosas burlas. Como reacción, se lanzó una suscripción pública para fundir la obra en bronce.
Nos queda en el tintero las colosales Iglesias, Los Inválidos y Versailles, pero no hay más espacio para esta entrega, razón por la cual nos sumimos en el pragmatismo de otro perfil del arte francés:

El placer de la gastronomía
Con otros trotamundos compramos Kebab con french frites, en rotiserías de los “hijos” del Corán. Mis paseos y mis viajes en el Métro los alterno, a la hora de la comida con: tourte, tartiflette, charcuterie y crêperies. Maxim´s, es un clásico. Los “snobs” lugareños, copa de vino de la Champagne, Burdeos, Borgoña, Loira, Ródano o Alsacia, en mano, se sientan mirando hacia la calle y la nouvelle couisine es la vedette.
A la hora del “petit déjeuner”: croissants, sandwiches, café, chocolat…

Colaboración: Ariel M. Beneitez- Técnico en Turismo - Guía de Turismo - Guía de Caza - Especialista en Ceremonial y Protocolo - (02954) 43-7632 / 1547-6460 - La Pampa.
E-mail: [email protected]